Debido a la quiebra de Lehman Brothers, Bankia está en la fase final de un acuerdo con algunos de los perjudicados por la misma.
Y por este acuerdo, la entidad que preside Rodrigo Rato asumirá un pago de cerca de 4 millones de dólares, unos 2,9 millones de euros, para evitar una posterior demanda que podría resultar muchísimo más cara.
En Bankia está hoy integrada Caja Madrid, que actuó como aseguradora de emisiones de Lehman Brothers y por ello fue demandada por no haber comprobado si la información que daba el Banco estadounidense que desató en parte la crisis económica global era verdadera.
Ahora el acuerdo que está a punto de cerrarse es con todas las entidades involucradas.
El fondo de pensiones Calpers se distanció del resto de los querellantes y presentó una demanda individual que, en primera instancia, fue desestimada por prescripción, pero que actualmente está recurrida.
De acuerdo a los cálculos de Bankia, en el peor de los casos el riesgo máximo por esta demanda sería de unos 16,6 millones de euros.
El Banco BFA, brazo financiero de Bankia, dio la información acerca del estado de los litigios de la misma en el folleto que registró en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Se supo que el mayor pleito contra la entidad es el interpuesto por la aseguradora Aviva mediante un arbitraje. Y este pleito es por una cifra cercana a los 935 millones de euros más los intereses correspondientes.
Bankia contestó a esta demanda aduciendo en que no hubo incumplimiento de las condiciones pactadas y en que la nueva situación de Aviva no le impide cumplir sus compromisos.
Otro de los pleitos que tenía la entidad, por el que Ribertierra le reclamaba 25,2 millones por una deficiente asesoría en financiación bancaria fue ganado por Bankia después de arduas negociaciones.
Lo cierto es que el folleto del Banco Financiero y de Ahorros muestra una muy larga lista de de pleitos a los que debe hacer frente Rodrigo Rato y su gente.
Este mismo folleto muestra los resultados de la matriz de Bankia de enero a noviembre del año pasado, lapso en el que el grupo tuvo un beneficio neto de 193 millones de euros. En el primer semestre las ganancias habían sido de 319 millones, por lo que se concluye que entre julio y noviembre BFA registró pérdidas por 126 millones de la moneda común.