Luis de Guindos, el ministro de Economía de España, se mostró en las últimas horas dispuesto a estudiar diversas alternativas para contrarrestar la salida del representante español en el consejo del Banco Central Europeo (BCE). Y entre estas alternativas podría estar la presidencia del Eurogrupo, que es el ente que reúne a los ministros de Economía de la Eurozona.
José Manuel González Páramo, el actual consejero español en el instituto emisor europeo, termina su mandato el próximo 31 de mayo, y no hay ninguna seguridad de que su sustituto sea también español.
De Guindos dijo que la opción de que España presida el Eurogrupo es algo que “todavía no está sobre la mesa”. Y añadió que son “posibilidades, opciones que están abiertas en estos momentos de la actualidad europea aunque todavía no hay nada cerrado en absoluto”.
Tendrán que ir siendo barajadas las distintas posibilidades, dentro de las cuales hay coberturas de varias posiciones abiertas en el BCE, en el Eurogrupo, en el Fondo de rescate permanente europeo, en el Banco Europeo de Reconstrucción y Desarrollo y en varias instituciones más.
Allí España deberá ir jugando sus cartas, ya que como socio importante y fiable de la Unión Europea se deberá negociar y hablar con el resto de los países a fin de tener una situación de cobertura que sea benéfica para todos.
De Guindos confía plenamente en que el año próximo, de algún modo, todas las reformas económicas y laborales que se están poniendo en marcha y el gran esfuerzo de consolidación fiscal que se está realizando van a empezar a dar sus frutos.
Para él, todo lo que se viene pergeñando se hace únicamente con el fin de que España vuelva a crear empleo a un ritmo aceptable, como lo ha sido siempre. Y en esta actual situación de economía global es importante explicar todo esto en las diferentes regiones del mundo, de allí su muy reciente viaje a China.
El ministro afirmó que pretende incrementar los lazos comerciales, financieros y económicos con Pekín, quien para él juega un papel de fundamental relevancia en el reequilibrio de la economía mundial.
De Guindos alabó la potencialidad enorme del gigante asiático y aseguró que España debe hacer todo lo que esté a su alcance para aprovecharla.