Luis del Amo, el representante del Consejo General de Economistas y Asesores Fiscales (Reaf), afirmó que, durante el transcurso de la actual crisis económica y financiera, la tendencia generalizada de las Comunidades Autónomas fue la de subir impuestos, no siempre de una manera ordenada ni equilibrada.
En un informe presentado hace unas dos semanas sobre la fiscalidad autonómica y foral, se analiza principalmente el restablecimiento del impuesto sobre el patrimonio de una manera temporal y se arriba a estas conclusiones. Como resultado de esta forma de actuar, se desprende que “las Comunidades Autónomas han legislado mucho, han establecido deducciones, bonificaciones… pero creemos que los beneficios fiscales que logran son poco potentes”.
El conjunto de las CA cerró el ejercicio del 2.011 con un déficit de casi el 3% sobre su PIB, una cifra que no muestra mejoras con respecto al año anterior. Para el año en curso, sin embargo, se espera que puedan reducir su déficit hasta el 1,5% tal como seguramente se los pedirá el Ejecutivo de España en el Consejo de Política Fiscal y Financiera que se está llevando a cabo hoy mismo. Y ante la imperiosa necesidad de encuadrar sus cuentas, la mayoría de las Comunidades optan por echar mano a los tributos.
En el Reaf se revisaron los impuestos sobre los que tienen competencia las CA, que son el IRPF, el de Patrimonio (IP), el de Sucesiones y Donaciones (ISD) y el Impuesto de Trasmisiones Patrimoniales y Actos Jurídicos Documentados (ITP y AJD).
Pero es muy complejo hacer un diagnóstico y determinar las regiones españolas donde se pagan más impuestos por la maraña legislativa vigente y el régimen de bonificaciones y deducciones.
Pero de cualquier modo se puede llegar a la conclusión de que Cataluña y Extremadura son las Comunidades que más acudieron a los tributos para intentar enderezar el rumbo bastante torcido de sus cuentas públicas.
Asturias también siguió este camino, pero Cataluña tiene quizás el tipo marginal máximo del IRPF de toda Europa, con el 56%.
Otro impuesto muy importante que en estas Comunidades es excesivamente alto es el que se paga por adquirir una vivienda de segunda mano.
En el otro extremo de la lista se encuentra Madrid, que es la región con la tributación fiscal más baja de toda España. Este lugar es compartido de muy cerca por Baleares y la Comunidad Valenciana, que es el único lugar de España donde está bonificado el impuesto de patrimonio en su totalidad.