En las últimas horas las autoridades del Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) que depende del Banco de España decidió prorrogar hasta hoy miércoles el plazo para presentar ofertas de compra no vinculantes por la Caja Mediterráneo (CAM).
Se estima que este retraso se debe al pedido de varias entidades con dificultades para completar la oferta no vinculante que permite acceder al libro de venta de la CAM.
Los candidatos a comprar la Caja hasta el momento son Santander, BBVA, CaixaBank, Popular, Sabadell, Barclays, las Cajas vascas e Ibercaja.
Estas entidades tendrán cuatro semanas para estudiar a fondo las cuentas de la entidad y deberán hacer una segunda oferta, esta sí de carácter vinculante.
A pesar de haber alrededor de diez entidades interesadas, en el mercado se considera que solamente tres tienen la suficiente fortaleza financiera para finalmente quedarse con la CAM, y éstas son Santander, BBVA y CaixaBank. Hasta se especula con que sólo las dos primeras serán las que puedan realizar ofertas realmente competitivas.
Hay varias posibilidades para realizar la operación. La más viable es que los interesados pidan al FROB que se haga cargo inicialmente de los más de 7.300 millones euros en vencimientos de aquí hasta diciembre del 2.012 y que después loa entidad compradora los pague con retraso y financiación.
También es posible que se pida aislar los activos más complicados de la entidad en una especie de “Banco malo” y que esos activos los asuma el Estado español. A cambio de eso, la contribución del FROB podría ser menor.
Debe recordarse que la CAM tiene casi 7.800 millones de euros dudosos en el sector promotor.
La semana pasada uno de los directores generales del Banco de España, José María Roldán, les comentó a los analistas en Londres que durante este año los activos inmobiliarios continuarán depreciándose en España a pesar de las caídas que ya registraron.
Fueron declaraciones bastante criticadas por muchos porque se considera que ahuyentarán a los inversores, mientras otros creen que sólo pasa por reconocer y coincidir con lo que afirman los analistas del sistema bancario español.
En otro orden de cosas, Caja España-Duero aprobó hace un par de días en una asamblea extraordinaria y con el 95% de los votos a favor la integración con Unicaja. Pero Caja España-Duero solamente controlará el 30% del capital porque la valoración que se hizo por Unicaja fue bajísima por los altos riesgos de morosidad a futuro.